Nota: En todas las citas bíblicas que aparecen
en este estudio, solo se mencionará el libro, en aquellas que no pertenezcan al
de Apocalipsis; de cuyo libro solo aparecerán los números. Las citas de los
otros libros solo se mencionarán una sola vez, mientras se esté desarrollando
el mismo tema y no se trate de otro
libro de la Biblia.
INTRODUCCIÓN.
INTRODUCCIÓN.
En el evangelio según san Lucas 21.28
dice: Cuando estas cosas comiencen a
suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza porque vuestra redención está cerca.
Sabemos que los planes de Dios toman su tiempo para que se realicen, y de tanto
oír acerca de la proximidad de su manifestación para el arrebatamiento de la
iglesia, o lo que acabamos de leer, que nos insta a levantar nuestras cabezas,
pueden parecer repeticiones de nunca
acabar.
Sin embargo, si para algunos lo que está
aconteciendo en el mundo no son avisos suficientes de la proximidad de nuestra
reunión con el Señor, es porque sus sensores espirituales están dormidos, o no
están en sintonía con la realidad. Para aquellos que están alerta, estos
acontecimientos deberían motivarlos al
estudio de la palabra de Dios, y en avisar predicando a los demás, acerca de
nuestra común salvación.
De todas maneras, aunque las cosas que
están sucediendo son reales y están a la orden del Día; al hablar a otros acerca de nuestra fe, estos
sucesos no deben ser nuestro tema principal;
evitando así trasmitir el temor, ya que al comentar sobre estos eventos, los
desastres ambientales y los terribles acontecimientos del futuro, infundirán
miedo al oyente, cosas que debemos evitar. El objetivo del creyente es:
Presentar la solución del amoroso y sencillo plan de salvación que Dios ofrece
a la humanidad al creer en Jesucristo Su Hijo.
Al estudiar estos temas escatológicos, nos
encontramos que entre el pueblo de Dios, siempre existen diferentes
interpretaciones para la mayoría de estos argumentos, y por supuesto que esto
incluye el estudio de las profecías, sobre lo cual unos exageran al interpretar
y explicar todo acontecimiento ecológico, político o económico, al relacionarlo
con el punto de vista bíblico y las profecías; Mientras otros demasiado
prudentes, no se atreven a opinar sobre ellas, y mucho menos si se trata del libro de Apocalipsis, por el
temor a equivocarse; atreviéndose a
criticar luego a los que lo hacen.
En la palabra de Dios no existen
exhortaciones a no extremar acerca de la profundización de temas relacionados con el
regreso del Señor, o escudriñar sobre este tema. Yendo a los hechos nos podríamos preguntar qué es
mejor: ¿ocuparse con mucho ahínco en el estudio de la profecía, o no hacerlo?
¿Hay realmente un límite en este campo?
¿Se podría criticar a un científico de profundizar demasiado para llegar
al origen de una enfermedad, o a un policía investigar minuciosamente un
crimen? Estamos en un tiempo que el creyente debería tener un periódico en una
mano y la biblia en la otra.
El propósito de este estudio, es para que
nosotros los creyentes, estemos instruidos acerca de los acontecimientos del
futuro, colocándolos en un relativo orden, de acuerdo a como están revelados
en los escritos bíblicos. No se hará un
análisis muy minucioso de los eventos anunciados por el Señor en Mateo 24, los
cuales promulgarían su regreso, tales como: guerras, rumores de guerra,
terremotos, hambre etc. Ya que estos, forman parte de nuestro diario vivir y como lo
anticipó nuestro Señor Jesucristo, todas
estas señales serían solo un
principio de dolores.
En estos últimos tiempos vemos y
escuchamos por todos los medios de comunicación los graves y cotidianos
acontecimientos que azotan a muchas naciones. Es por esta razón, que se le dará
más relevancia a aquellos que paralelamente a estos se están realizando en
estos días, de acuerdo a las profecías bíblicas (unas escritas hace casi 2000
años, y otras dadas con anterioridad) las cuales están a la orden del día.
Es obvio que la exposición de estos temas,
son para aquellos que creemos en la Biblia, como la palabra de Dios revelada al
hombre, y la única guía de su plan y voluntad mientras viva en este mundo. De
no creer que la Biblia sea la palabra de Dios, donde le revela al hombre toda
su historia desde su creación, hasta el fin de sus días en el futuro, sería
perder el tiempo en seguir su lectura; ya que toda su exposición está basada en
los escritos que ella contiene. Para facilitar y confirmar los temas que se
exponen, se tomará en cuenta las citas bíblicas las cuales todas, o casi todas,
son transcritas de las versiones La Biblia Textual, Reina Valera 1960, y la
N.T.V.
Seguramente durante el desarrollo de estos
temas, se encontrarán algunas repeticiones motivado a los diversos aspectos de los
argumentos esgrimidos, como por ejemplo: ese resplandor que anunció el Señor
que se produciría en Su regreso, para que distinguiéramos ese gran evento, de los falsos cristos que vendrían en su lugar.
Como el efecto que tendrá el mismo en los enemigos de Dios al momento de Su
regreso me obliga a repetir el mismo hecho en ambos casos sea para la advertencia, como para
el efecto que este tendrá, entre otros.
Es posible que alguien no esté de acuerdo
con algunos puntos de esta exposición; el que la lea o la escuche debería
aplicar el consejo bíblico en 1 Tesalonicenses 5.21 que dice: “Examinadlo todo; retened lo bueno”. De
manera que, entre las diversas interpretaciones u opiniones debemos ver cuál de
ellas concuerda con la palabra de Dios, antes que la tradición o el
razonamiento humano. De este modo y sin tratar de que prevalezcan previas
enseñanzas o tradiciones, se invita al lector a llegar a conclusiones propias
sobre el tema que está por exponerse. Siempre
es bueno conocer los puntos débiles y fuertes de cada teoría aunque no se esté
de acuerdo por convicciones personales con ellas; eso demostrará una robusta
madurez cristiana. Sé que no soy escritor, ni un ducho en la ortografía, solo
trato de exponer lo que he podido entender por medio de la Biblia y la ayuda
del Espíritu que nos ha sido dado.
Por último, se muy bien, y la palabra de
Dios lo dice: “Ninguno es profeta en su
tierra.” Me explico; este estudio sería mejor aceptado si no se conociera quien es, el que lo escribió.
CAPÍTULO 1.
EVENTOS PROFETIZADOS, Y ACTUALMENTE EN DESARROLLO
LA MANIFESTACIÓN DE LOS FALSOS CRISTOS. Si alguien preguntara: ¿qué señal se debería esperar en estos días previos a la venida del Señor? Una respuesta sencilla podría ser: Aparte de todos los desastres ecológicos ya nombrados que están en desarrollo, sería la aparición de unos falsos cristos; cuyas señales están previstas antes del arrebatamiento de la iglesia, seguido luego por la manifestación del verdadero anticristo, y de los dos testigos que han de actuar contemporáneamente, lo cual se explicará más adelante.
Sin embargo, es prudente recordar y tomar
en cuenta, cuáles fueron las apreciaciones
del Señor en los dos anteriores juicios: el de los días de Noé y el de Sodoma y
Gomorra. Referente a los días antes del
diluvio en Génesis 6.5 dice: “Vio entonces YHVH que la maldad del hombre
se había multiplicado en la tierra, y que toda forma de pensamiento de su
corazón era solamente el mal continuamente”.
Pasarían luego unas doce generaciones
desde el diluvio, cuando el ángel de YHVH le dijo a Abraham en Génesis 18.20-21: “Entonces dijo YHVH:
Por cuanto el clamor contra Sodoma y Gomorra es grande, y se ha agravado en
extremo su pecado, descenderé ahora y veré si en todo han obrado según el
clamor que llega hasta mí, y si no, lo sabré”.
El pecado y
la maldad de los hombres, es el detonante para que se ejecute el juicio de
Dios. No es fácil medir a qué punto esté la maldad de la humanidad en la
actualidad, ni saber cuál es la medida para que Dios actúe, pero se sabe que
actualmente ha aumentado en gran manera. Por esta razón, solo nos resta ver los
detalles preliminares que el Señor reveló acerca de esos falsos cristos, como
otras advertencias.
En efecto, ya hay varios falsos cristos actuando
en este mundo, todos ellos con miles de seguidores convencidos que se trata del
propio Jesucristo. No sin razón el Señor avisó para alertar a los simples; en
Lucas 17:24 dice: “Porque como el
relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro,
así será el Hijo del Hombre en su día”. Pero por el resultado, parece ser
que lo que el Señor dijo, para algunos de nada les ha servido o simplemente lo
desconocen; porque si la palabra de Dios no se lee, las advertencias de nada
sirven.
En un reportaje de la revista National
Geografic, salió que hay tres hombres que han manifestado ser Jesucristo en persona.
Estos son: un tal Tiboloy en Filipinas, un tal David, en Inglaterra y otro en
Siberia. Aunque en ese reportaje no lo menciona, para esa fecha había otro más,
un tal Miranda de Puerto Rico, que al parecer ya partió de este mundo para
rendirle cuenta a Dios de esa supuesta identidad.
José Luis De Jesús Miranda, sufría de
cirrosis hepática, y su estado de salud era delicado, aunque en su tiempo salió
diciendo en un vídeo que se encontraba mejor que nunca esperando su
transformación. Sin embargo murió en agosto, o el domingo 16 de noviembre del
2013, en la ciudad de Miami; para más
detalles puede informarse en la
siguiente dirección.
https://www.youtube.com/watch?v=k3XkY6-CqGo
(Murió después de haber sufrido un derrame
cerebral, según lo confirman los propios medios de “Creciendo en Gracia” su organización religiosa). Es de suponer que estos impostores al
asumir la identidad de tan importante ser, como lo es la persona de Jesucristo,
deberían tener un más amplio conocimiento bíblico, para poder simular lo que
afirman ser. Entonces viene la pregunta: ¿creerán realmente en el papel que
están asumiendo, y lo que la Biblia advierte? Peor aún, es la situación de los
que le siguen y creen ciegamente en ellos, aceptando todo lo que dicen y
afirman ser.
¿Entenderán estos falsos cristos, que la
secuencia bíblica para el regreso de Jesucristo, será precedida por la manifestación de la bestia el verdadero
anticristo, el cual no se ha
manifestado aún? Lo otro es, que mientras el Espíritu Santo esté como residente
en este mundo y en la Iglesia, no podrá manifestarse el hombre de pecado, que
es el anticristo. Luego si hay tres que manifiestan ser el cristo, ¿será que
todos ellos no entienden que hay un solo Jesucristo, que al venir a este mundo, su luz resplandecerá
como el fulgurar de un relámpago?
De manera que todos esos impostores y los
que podrán surgir en el futuro, son todos sin lugar a dudas, “anticristos en
busca de gloria terrenal”; los cuales, solo aprovecharán, por un poco de
tiempo, esa gloria de sus seguidores engañados; para luego tener que dar cuenta
a Dios de esa falsedad y usurpación de identidad.
Ahora bien, si la misma palabra explica
que el hombre de pecado que es el anticristo viene antes de Jesucristo; ¿qué
apoyo bíblico tienen esos imitadores para engañarse ellos mismos, como a todos
los demás? Referente a los que creen en esas falsedades, a ellos la palabra de
Dios lamentablemente los define, como hojas llevadas por cualquier viento de
doctrina. Hay muchos de ellos que se atreven a defender con vehemencia esas
falsedades.
Se podría entender, que los que afirman
ser el Cristo, lo hacen buscando su propia gloria dejándose usar por el diablo,
usurpando la gloriosa identidad de Jesús, al decir que son el Cristo. Pero ¿es que entre esos miles y miles de
seguidores, ninguno de ellos ha leído ese pasaje, de Lucas 17 donde el Señor
advierte del resplandor que tendrá lugar
a su regreso, o es que simplemente lo omiten? Esto es algo grave y
preocupante, tanto para ellos por no leer y escudriñar las escrituras, como
para nosotros los creyentes que posiblemente no hemos difundido suficientemente
la palabra de verdad para contrarrestar semejantes hechos.
Ya se ha explicado cómo han aparecido
varios cristos, los cuales no tienen la menor idea que están siendo usados por
el diablo, al prepararle las condiciones necesarias para el desarrollo del plan
satánico, cuando se manifieste el verdadero anticristo, el cual al aparecer con
el poder otorgado por el diablo demostrándolo con gran autoridad y señales. Seguramente
aprovechando esa situación, hará uso de
la misma palabra de Dios simulando ser el verdadero Cristo, le dirá al
mundo: ¿no os lo dije antes todo esto,
anticipándoles que antes de mí vendrían falsos cristos? ¿No leísteis: “Porque se levantarán
falsos mesías y falsos profetas, y darán señales y prodigios, a fin de
extraviar, si fuera posible, a los escogidos”. Refiriéndose al pasaje de Marcos 13:22.
Luego simulando ser el cristo le agregará:
Los que vinieron antes de mi eran
todos engañadores, “yo soy el verdadero, siendo él también otro engendro satánico”. Es
lamentable como esos engañadores se presten a esa farsa, y mucho más triste la
actitud de esos seguidores ciegos, que son como hojas llevadas por
todo viento de doctrina.
Jesucristo dio una clara señal de su
venida a este mundo, y no solamente para
el pueblo de Israel, sino para todos en general a fin de no ser engañados. ¿Será
que ninguno de ellos siendo seguidores de un supuesto cristo lee la Biblia?
¿Acaso vieron ese fulgurante resplandor que será visible para todo el mundo? Si
eso no aconteció, ¿no se dan cuenta que están siendo engañados, y están
alimentando el ego de esos farsantes al seguirlos?
De manera que, mientras el Espíritu Santo
esté como residente en este mundo y en la Iglesia, no habrá manifestación
alguna del verdadero hombre de pecado. Solo hay espacio para estos emuladores,
que se atreven a presentarse como cristos para prepararle la entrada en la
escena mundial del verdadero anticristo.
Es inexplicable cómo algunos puedan vivir
completamente ajenos a las cosas de Dios y a su plan para este mundo, porque si
antes del regreso de Jesús, está previsto que ha de manifestarse el hombre de
pecado, ¿cómo es que surgen tantos imitadores y para colmo varios al mismo
tiempo? Bien enseña la palabra diciendo: “… porque
viendo no ven, y oyendo no oyen, ni
entienden”. Mateo 13:13 Porque no tienen el Espíritu de Dios, o lo hacen
con otro fin.
LO QUE LA PALABRA NOS ENSEÑA ACERCA DEL ANTICRISTO
Por supuesto, la palabra de Dios nos
advierte sobre estos engaños diciéndonos de una manera clara que: antes del
regreso de Jesucristo a este mundo tiene que manifestarse el hombre de pecado,
el anticristo. Así lo dice en 2 Tesalonicenses 2:3 ¡”Nadie os engañe en ninguna
manera!, porque no sucederá sin que antes venga la apostasía, y sea manifestado
el hombre de iniquidad, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta
contra todo lo que es llamado Dios u objeto de adoración, hasta el punto que se
sienta en el santuario de Dios, proclamando que él mismo es Dios”.
De manera que, no se entiende cómo pueden
estar tan espiritualmente ciegos, para no entender que las cosas que están
aconteciendo, no se ajustan a la realidad bíblica. Para los que ciegamente creen en esos farsantes,
y no creen en la verdad que es Jesús, el
enemigo les entorpece la mente para que crean en la mentira. Bien lo dice
en Marcos 4:12: “Para que viendo, vean y no perciban; y oyendo, oigan y no entiendan;
para que no se conviertan, y les sean perdonados”. Por último, considerando detenidamente los
varios aspectos de la situación en el ámbito mundial, se podría asegurar que en
algún lugar de este mundo, ya Satanás tiene preparado su títere, el hombre que
ha de surgir como el anticristo.
La palabra lo identifica también como la bestia que recibirá la autoridad del
Dragón. En el 13:4 dice: “y adoraron
al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia,
diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella”? Sin
embargo según lo revela la misma palabra, él no podrá manifestarse mientras
esté presente Él que lo detiene. Esto se debe a que, donde hay luz no puede
haber oscuridad; y solo cuando la luz es quitada puede reinar las tinieblas.
Uniendo esto a la teoría de Einstein, que
la obscuridad es solo la ausencia de la luz.
Esa oscuridad
se manifestó cuando el Padre apartó su mirada de su hijo en la cruz; ya que vio
en Él el pecado de toda la humanidad. Al apartar su rostro de Él,
hubo tinieblas por tres horas antes que Jesús entregara su espíritu. Lo mismo
acontecerá cuando Dios apartará su rostro de los que no pudieron ver en Jesús
el camino de la salvación, por ser Cristo el único camino para obtenerla. Según nuestra creencia pre milenaria, la
iglesia para el tiempo de la gran tribulación estará en el cielo con el Señor.
Esto será por varias razones, de las cuales se mencionarán dos que son muy
importantes. La primera de ellas es,
lo que la Biblia nos enseña: que este hombre de pecado no se manifestará
mientras no sea quitado Él que se lo impide.
Así se nos enseña en 2ª Tesalonicenses 2.7 diciendo: “Porque
ya está en acción el misterio de la iniquidad; solo que hay quien al presente
lo detiene, hasta que Él a su vez sea quitado de en medio”. Aunque siempre
ha estado obrando, aun desde los tiempos del apóstol Pablo. Al decir que Él, a su vez sea quitado de en medio, se está refiriendo a una
persona, y esta no puede ser otra que el Espíritu
Santo de Dios, que está como residente en este mundo. De haberse referido a
la iglesia (como algunos piensan) tendría que haber escrito: “la que impide sea quitada” de en medio.
Sin embargo podemos decir que: indirectamente al ser quitado el Espíritu Santo
también lo será la iglesia, por cuanto somos una sola cosa con Él, que es nuestro Dios. Razón por la
cual la iglesia no estará presente en la tierra durante el período de la gran
tribulación. Como se comentó anteriormente y explicaremos más adelante.
La segunda razón es, que en el verso 10 da el motivo
por la cual vendrá esa tribulación para
los que se habrán quedados diciendo: “Yo
también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo
entero para probar a los que moran sobre
la tierra”.
Si
esa tribulación viene para probar a los que moran sobre la tierra, ¿qué sentido
tendría que un novio de amor y misericordia como Jesús que dio su vida para
rescatarnos, ahora permita que la
iglesia pase por la gran tribulación para probarla? ¿Acaso no es la fe que
Él mismo nos dio; la cual hemos
depositado en Él (que la palabra la describe como más preciosa que el oro)
suficiente para ser hechos hijos de Dios? Se podrían agregar otros argumentos,
pero no son necesarios ya que en definitiva, Dios guardará a los que son suyos
como siempre lo ha hecho.
CAPÍTULO 2
LO QUE POSIBLEMENTE
SERÁ EL PROXIMO EVENTO.
LA GRAN BATALLA POR ESE LUGAR OCUPADO EN EL
CIELO.
Si se analiza lo que dice el apóstol Pedro,
que los creyentes tenemos un lugar reservado para nosotros en el cielo, es lógico
pensar que los que lo ocupan actualmente, (las huestes del mal) tienen que abandonarlo
para que lo disfruten aquellos a los cuales Dios se los tiene reservado. De manera que antes del traslado de la
iglesia al cielo, el Señor tendrá que desocupar ese lugar, arrojando a los seres
antagónicos a la voluntad de Dios; para que lo ocupen aquellos por la cual esa
herencia está reservada. Como dice el apóstol en 1 Pedro 1:4 “… para una herencia incorruptible,
incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros”.
Al ser quitado de en medio Satanás y sus
ángeles y ser lanzado a la tierra, ya ese lugar reservado en los cielos será
para los redimidos, y estará listo para ser ocupado por la iglesia. Jesucristo, antes de morir y subir al
cielo de donde vino, seguro de ser vencedor sobre la muerte y el pecado, Él
dijo en Juan 14.2: voy pues a preparar
lugar para vosotros. Esa expresión tenemos que interpretarla
con un significado más real de lo que humanamente, se pueda interpretar, lo
cual es: Voy pues, a desocupar ese lugar en el cielo cuya herencia incorruptible
está reservada para vosotros. Una parte de ese universo celestial está actualmente
y temporalmente, ocupado por Satanás y sus ángeles. Todo lo explicado
anteriormente se encuentra en la palabra de Dios, como lo que acontecerá en muy
poco tiempo cuando serán arrojados a la tierra.
La palabra nos relata claramente que habrá
una batalla final en el cielo; y es bueno tener presente que las cosas no han
sido tan sencillas ya que lleva casi dos mil años. En el 12.7, nos habla de esa
batalla decisiva, al decir: “Estalló una
batalla en el cielo: “Miguel y sus ángeles para luchar contra el dragón; y
luchó el dragón y sus ángeles, pero no prevaleció, ni fue hallado ya en el
cielo lugar para ellos. Y fue arrojado el gran dragón, la serpiente antigua, el
llamado diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la
tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él. Entonces oí una gran voz en el
cielo, que decía: ¡Ahora han venido la salvación y el poder y el reino de
nuestro Dios, y la soberanía de su Ungido, porque fue arrojado el acusador de
nuestros hermanos, el que los acusaba día y noche delante de nuestro Dios”!
Aunque la más grande victoria que tuvo
Jesucristo sobre Satanás fue en la cruz, el haber desocupado los cielos de esas
potestades y gobernadores espirituales. Fue uno de los mayores logros en esa
lucha contra ellos; siendo de
mucha importancia ya que la misma palabra da a entender que combatir
contra ellos es más dificultoso que luchar contra sangre y carne.
Así lo da a entender cuando se lee en
Efesios 6.12 que dice: “Porque no tenemos
lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra
los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de
maldad en las regiones celestes”. Al
obtener en el cielo la victoria contra esos ejércitos celestiales; faltarían
todavía dos batallas, que se desarrollarán en este mundo: La de Armagedón, y la
de Gog y Magog al final del milenio. Éstas serán en contra de los que se
dejarán influenciar por Satanás, la bestia y el falso profeta, como gobernantes
de las tinieblas; que lucharán arduamente sabiendo que al abandonar el cielo,
ya les queda muy poco tiempo antes del castigo final de ese conflicto de los
siglos que termina en el lago de fuego.
UN SIMIL.
Desde que Jesús venció en la cruz, Él ha
sido el Rey de reyes, pero en el plan de Dios todo tiene su debido tiempo. Un
ejemplo similar lo tenemos con lo que aconteció con el rey David. Para Dios, David era rey de Israel desde el momento que Samuel le ungió, sin
embargo, tuvo que esperar muchos
años hasta que su opositor Saúl,
fuera quitado, para que él pudiera asumir el reinado.
En ese momento, de lanzarlos de los cielos a la tierra, Jesucristo asume el
control total de los cielos y del reino. Después de esa victoria, solo faltarán
como se dijo las dos últimas batallas, que tendrán lugar una antes y otra al
final del milenio, para la eliminación total y definitiva de todos los enemigos
de Dios y Jesucristo reine por los
siglos de los siglos.
EL ARREBATAMIENTO, O TRASLADO DE LOS
REDIMIDOS.
Se entiende que éste es un tema, del cual hay diversos escritos, opiniones y enseñanzas
tradicionales que han confundido y siguen manteniendo en ese estado de
confusión doctrinal a muchos creyentes en la actualidad. De manera que se
tratará de explicar su contenido de la
manera más ajustada a las enseñanzas que nos ofrece la palabra de Dios.
En el momento de efectuarse ese glorioso
evento, la humanidad quedará dividida en varios grupos los cuales hay que
tenerlos presente en nuestra mente con el fin de evitar expresiones, tales
como: ¿Todos resucitarán al mismo tiempo?, ¿todos tendremos el mismo cuerpo y trato? ¿Todos los escogidos serán arrebatados? Y
otras preguntas más.
r por el momento, el
lugar exacto donde “reposan todas y cada una de las almas”, que se encuentran
en ese espacio infinito del universo, se dirá que los creyentes no somos los
únicos, ya que existen varios grupos. Cada uno de ellos, tanto los que están
inscritos en el libro de la vida, Como
los que están en el ”libro de la casa de
Israel”, o en el “libro de la vida
del cordero”; los cuales tienen un trato y sitio diferente en el plan de
Dios. También hay los que no están inscritos en ninguno de los libros nombrados.
Como también existe otro grupo de espíritus también hijos de Dios, que no pertenecen a la raza
humana que están en diferentes sitios, de los cuales se explicará más adelante.
Pero antes de seguir con el tema, se
quiere apresurar la explicación de los
tres libros de la vida que se mencionaron anteriormente (aunque
seguramente esos libros son simbólicos, ya que todo está en la mente de Dios). Con
el fin de que se pueda entender mejor se manejará como libros o rollos para que
se pueda razonar adecuadamente. Aunque pueda que existan otros libros, solo se disertará sobre el LIBRO
DE LA VIDA.
En ese libro o rollo, como se le quiera
llamar, están inscritos todos los que
fueron escogidos desde antes de la fundación del mundo. Sin embargo, ese
libro tiene dos secciones: en la primera
están, como se dijo, los nombres de los que pertenecen a la casa de Israel; y
en la segunda todos los inscritos que pertenecemos por medio de la fe en Jesús,
en el libro de la vida del cordero.
No es como algunos piensan, que para Dios
todos somos iguales, de ninguna manera; por lo que la Biblia nos revela no es
así. Aunque todos los escogidos pertenecemos a la gran familia de Dios, ésta a
su vez está separada en grupos; de los cuales unos pertenecen a la familia
celestial y el otro a la familia terrenal. Según se lee y afirma en Efesios 3.14-15 que dice: “Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor
Jesucristo, de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra”.
Veamos ahora donde se encuentra el respaldo bíblico para esos libros. El libro mayor lo
tenemos en Apocalipsis 20:12 y dice: “Y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida”. Luego en Ezequiel
13:9 afirma: “Mi mano está contra los profetas que
tienen visiones vanas y adivinan mentira. No estarán en la congregación de mi
pueblo, ni serán inscritos en el libro
de la casa de Israel, ni entrarán a la tierra de Israel, y sabréis que Yo
soy Adonay YHVH”.
Y por último el de la vida del Cordero lo
hallamos en Apocalipsis 21:3 cuando el ángel le muestra a Juan la nueva Jerusalén donde oye una gran voz procedente del trono, que
decía: “He aquí el tabernáculo de Dios
con los hombres, y morará con ellos, y ellos serán pueblos suyos, y Dios mismo
estará con ellos. Y me llevó en espíritu a un monte grande y alto, y me mostró
la ciudad santa, Jerusalén, descendiendo del cielo, de Dios”. Luego más
adelante le dice en el 21:27: “No entrará en ella ninguna cosa inmunda, o
que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero”.
Volviendo al
tema de los varios grupos y sus respectivos sitios para cada uno de ellos, se
puede pensar que por lo menos hay unos
siete que pueden ser identificados que son:
1) Los ángeles
que permanecieron fieles a Dios durante la rebelión satánica en contra de Dios.
2) Los creyentes que pertenecen a la familia de
Dios en los cielos y cuya herencia está en las mansiones celestiales.
3) Los creyentes que están debajo del altar en
el 6:11, a los cuales se les dijo que descansaran aún un poco de tiempo hasta que
se completara el número de sus consiervos, y hermanos que debían
ser asesinados como ellos.
4) Los creyentes que salen de la gran
tribulación. Estos son los que completarán el número de los que están debajo
del altar en el 6.11. Todos ellos resucitarán al regresas Jesús después de la
gran tribulación.
5) Los creyentes que pertenecen a la familia
terrenal, los herederos de cielo y tierra nueva.
6) Los impíos muertos en delitos y pecados.
7) Los ángeles que están “libres” con
Satanás y los que están en el abismo.
A continuación un breve comentario de cada
uno de ellos y su destino final a la luz de la palabra.
DESCRIPCIÓN RESUMIDA DE LOS GRUPOS
MENCIONADOS.
1) Los
ángeles que permanecieron fieles a Dios.
A este
grupo la Biblia lo llama también “hijos de Dios” por ser creado por un acto
soberano de su voluntad, éste no está formado solamente de ángeles,
sino de arcángeles, querubines,
serafines y posiblemente otros que no han sido revelados. Su morada está en el cielo
de Dios. Forman parte de ese universo celestial y tienen acceso al trono de
Dios, donde le sirven y le adoran. Asisten y hacen que se cumpla a cabalidad el plan de Dios. Están presentes en todo
evento, sea celestial como terrenal. Ellos estarán en el juicio del Gran Trono
Blanco, como testigos de su fidelidad, y no para ser Juzgados.
2) Los
creyentes que pertenecen a la familia de los cielos.
A este grupo pertenecen las almas de todos los creyentes
renacidos por medio de la fe, los que están inscritos en el libro de la vida
del Cordero. En este momento ellos están desvestidos de sus cuerpos y están
siendo consolados por el Señor, juntos a la gran familia de Dios. Ellos forman
parte de esa gran nube de testigos que tenemos alrededor de nosotros de los que
se nos habla en hebreos 12:1 que dice: “Por
lo cual también nosotros, teniendo alrededor nuestro una tan grande nube de
testigos, desprendiéndonos de todo peso, y del pecado que nos asedia corramos
con paciencia la carrera que nos es puesta delante”.
De manera que no se puede pensar que estén
durmiendo, al contrario se les permite
ver y posiblemente oír lo concerniente a nuestras actitudes. Además tenemos una
maravillosa enseñanza en Lucas 16 con el relato del rico y Lázaro, donde el
rico, veía, hablaba, oía, razonaba, recodaba que tenía 5 hermanos y sufría en
esa llama; mientras él estaba desvestido de su cuerpo, el cual yacía en el
sepulcro.
En Lucas 16:24 se nos enseña acerca del
clamor del rico al decir: Y dando voces,
dijo: ¡”Padre Abraham, ten misericordia de mí! y envía a Lázaro para que moje
la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, porque estoy atormentado en
esta llama”. ¿Le hacía falta un cuerpo al rico para sufrir, o le hacía
falta un cuerpo a Lázaro para ser consolado?
(Hace unos días oí a un veterano creyente,
refiriéndose al pasaje del juicio del Gran Trono Blanco, comentar lo siguiente:
“y el que no fue hallado inscrito en el libro de la vida: será enviado al lago de fuego con su cuerpo”).
Pienso que se debería meditar mejor sobre este
único relato de la Biblia de Lucas 16. Ya que claramente en este pasaje se nos da
a entender que el alma sufre el castigo
por no haber obedecido a Dios aún sin tener un cuerpo. Todo lo que Jesús, dio a
conocer allí referente al rico fue sin poseer el cuerpo, ya que su alma estaba
desvestida en ese momento. De modo que todo, aun los sentimientos y los sufrimientos
que tenía eran concernientes al alma desnudada de su cuerpo. ¿Nos hemos puesto a meditar que en ese
pasaje, todo lo que allí relata tiene el propósito de enseñarnos cuál es el
alcance, y lo que puede hacer el alma en esa dimensión? Donde aun estando desvestida del cuerpo no perdió
ninguno de sus sentidos, ni su memoria. Estaba actuando normalmente aunque su
cuerpo, por lo que dice la palabra estaba en la tumba.
Hay quienes pretenden alterar su preciosa
enseñanza diciendo, que esa fue una parábola, dando a entender, que es como una comparación,
o una semejanza de lo que pudiera acontecer en el más allá. Todo eso con el fin
de desvirtuar, la cruda enseñanza de lo que acontece después de la muerte. No,
amigo o amiga, Jesucristo nunca utilizó nombres propios en sus parábolas, como lo hizo en ésta,
usando los nombres de personas conocidas que vivieron, como Abraham y Lázaro.
3) Los creyentes que
están debajo del altar en el 6:11.
Normalmente este pasaje, que para algunos pasa
casi desapercibido, es de mucha importancia para Dios. Éste es un grupo selecto,
por haber resistido al enemigo hasta el punto de ser asesinados, antes que
negar su fe en Jesucristo. Dios los tiene contados a cada uno de ellos, con un número
que solo Él conoce. Ellos no pudieron tener una vida normal, una familia y
amistades para compartir, ya que sus vidas fueron cortadas antes del tiempo,
que hubiera podido tener de no ser por su fe.
Debido a que esta revelación del 6:11 se
le muestra a Juan durante el día del
Señor, donde es de suponer que ya se efectuó la resurrección y el
arrebatamiento de los que estaban desvestidos (usando el término del apóstol Pablo
de las almas, que están separadas del cuerpo), se nos quiere dar a entender
claramente que es un grupo aparte de los demás ya de no ser así no había razón
de nombrarlo.
De manera que estas almas están esperando
el momento cuando se les reivindique su prematura muerte. En el 6:10 se dirigen
al Señor: “Clamando a gran voz, diciendo:
¿Hasta cuándo, Soberano Señor, Santo y Verdadero, no juzgas y vengas nuestra
sangre de los que moran en la tierra”?
De ellos también se nos relata en Hebreos 11:37-40 diciendo que esto: “fueron apedreados, tentados, aserrados, murieron pasados a cuchillo; anduvieron
errantes vestidos con pieles de ovejas, con pieles de cabras, indigentes,
afligidos, maltratados; ¡el mundo no era digno de ellos!, deambulando por
desiertos y montes, en las cuevas y cavernas de la tierra. Y todos éstos,
aunque alcanzaron buen testimonio mediante la fe, no recibieron la promesa; habiendo
Dios provisto para nosotros alguna cosa mejor, para que ellos no fueran
perfeccionados aparte de nosotros”.
No es que ellos no merecían que se les
revistiera de un nuevo cuerpo en ese momento cuando ocurre el arrebatamiento de la iglesia,
sino que Dios tiene un plan preconcebido por el cual tenían que esperar un poco
más de tiempo hasta que se completara ese número establecido. La respuesta que se les dio en el 11 fue: “Y a cada uno le fue dada una túnica
blanca, y les fue dicho que descansaran aún
un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos, el de
sus hermanos que debían ser asesinados también como ellos”.
¿Cuándo se completaría ese número?
aproximadamente en algo menos de esos siete años, del período de la gran
tribulación. Ya que el anticristo en ese tiempo comenzaría a matar tanto a Israelitas como a gentiles,
opositores a sus pretensiones de adoración. Estos se añadirían al número de los
del 6.11; por negarse a adorar la bestia y a ser sellados o adorar a la bestia.
Está claro que todo eso ocurrirá durante ese período del día del Señor hasta la
guerra de Armagedón, cuando la bestia y
el falso profeta serán lanzados vivos en el lago de fuego; y ya no habría más
ejecuciones ordenadas por ellos.
Es
probable que este grupo debajo del altar como tienen que esperar que termine la
tribulación para ser revestidos, ellos sean los bienaventurados que son
invitados a las bodas del Cordero. Del 19:9 que dice: “Y me dijo: Escribe: Bienaventurados los
que han sido invitados a la cena de la fiesta de las bodas del Cordero. Y me
dijo: Éstas son palabras verdaderas de Dios”.
Al completarse el número que Dios
determinó, ellos resucitarán para reinar con Cristo mil años. Así lo afirma la
palabra en el 20:4 diciendo: “Y vi
tronos, y se sentaron en ellos, y les fue concedido juzgar. Vi también las almas de los decapitados por
causa del testimonio de Jesús y por causa de la palabra de Dios, y a los que no
habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni habían recibido la marca en la
frente y en su mano, y volvieron a vivir para reinar con el Mesías mil años:
Ésta es la primera resurrección”.
Haciendo un resumen, según lo que acabamos de
ver, tenemos que al inicio de la gran tribulación serán revestidos con un
cuerpo celestial todos los que confiaron en el cordero de Dios. Comenzando desde
Adán, Abel y hasta el último antes del arrebatamiento; todos ellos habrán resucitado. Luego por los motivos
expuestos anteriormente resucitarán, según disposición de Dios, todos los que
son de Señor en su regreso con los que fueron muertos por el testimonio de Dios
y su palabra por la bestia y el falso profeta.
Entiendo que para muchos la anterior
explicación podría ser difícil de
poderla asimilar fácilmente, pero esto no altera en absoluto el orden
establecido en la palabra por el apóstol Pablo en 1 Corintios 15.23 que dice: “Pero
cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; (y los creyentes en
Jesús por haber resucitados juntamente con Él) luego los que son de Cristo, en su venida. (En su regreso donde
todo ojo le verá) Luego el fin: cuando
entregue el reino al Dios y Padre, cuando suprima todo imperio, y toda
autoridad y poder”.
Luego en el 20:6 agrega: “Bienaventurado y santo el que tiene parte en
la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino
que serán sacerdotes de Dios y del Ungido, y reinarán con Él mil años”. (Los
paréntesis fueron añadidos para una mejor comprensión). Las afirmaciones de los
anteriores pasaje bíblicos no incluye a los creyentes que resucitaron en el
arrebatamiento los cuales son parte del cuerpo de Cristo.
4) Los creyentes
asesinados durante la gran tribulación.
Éstos que serán asesinados durante los
años de la gran tribulación, son como se explicó anteriormente, los que
complementarán el número de consiervos y hermanos. Es decir judíos y gentiles para
completar un número que sólo Dios conoce de los del 6.11; los cuales resucitarán al final de la
tribulación para reinar con Cristo en el
milenio.
5) Los creyentes
que pertenecen a la familia terrenal.
Por ser este tema algo complejo para
definir, y poder afirmar con certeza cuál sea la calidad como la totalidad y
variedad de ellos, se hará un resumen de las ramas que los componen. Sin
embargo está claro que ellos pertenecen a la familia terrenal de Dios y a las
promesas de ese cielo nuevo y tierra nueva. De manera que al descender todos
nosotros de la familia de Noé, podemos llegar
a la conclusión que ese abundante grupo es parte de las dos naciones benditas
de esa profecía sobre Sem y Jafet. Es decir de la nación de Israel por Sem, como
de los gentiles por medio de Jafet. Sabemos, según la profecía, que de Sem vino
la nación de Israel, el cual sería en el futuro el heredero del cielo y tierra nueva según la
profecía. Y como la descendencia de Jafet moraría en las tiendas de Sem. Podemos
decir que muchos de los gentiles de la línea bendita de Jafet, vivirán en esa
tienda del “cielo y tierra nueva” junto a Israel.
6) Los impíos muertos en
sus delitos y pecados.
Se podría decir que estos son todos
aquellos que no están inscritos en el libro de la vida, sin embargo en Juan 3:19 lo resume mejor diciendo: “Y esta es la acusación: que la luz vino al
mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, pues sus obras eran
malas”.
A
este tipo de personas se les puede hablar hasta el cansancio de la cosas de
Dios, y nunca llegarán a creer y amar a Dios. Desde los tiempos de Adán hasta
después del milenio siempre tuvieron ese espíritu de rebelión. Un ejemplo de lo
que se dijo lo tenemos en lo siguiente: Al estar Satanás
atado por mil años, una parte de ellos vivirá en el reino de Dios durante el
milenio. No serán instigados por el diablo a delinquir, tendrán paz, justicia,
seguridad y una naturaleza y fauna amigable.
Sin embargo, al ser librado de nuevo
Satanás se le unirán para la última rebelión permitida por Dios de esos
incorregibles, seres impíos. Actualmente parte de ellos se encuentran en el Hades
y al final de los siglos se levantarán para comparecer delante del Juez de toda
la tierra en el Juicio del gran trono blanco para ser juzgados y castigados.
7) Los ángeles que
están “libres” con Satanás y los que están en el abismo.
Hay que distinguir entre los ángeles que
dejaron su morada, y no guardaron su dignidad antes del diluvio humanándose, de
aquellos que están todavía en lugares celestes que serán arrojados a la tierra
próximamente como lo relata en el capítulo 12 que están confinados en el abismo.
De éstos habla Judas en 1:6 cuando dice: “Y
a los ángeles que no guardaron su estado original, sino que abandonaron su
propia morada, los ha mantenido bajo oscuridad, en prisiones eternas hasta el
juicio del gran día”.
En algún lugar de este espacio infinito está
lo que la palabra nombra como abismo. Lo menciona en varias oportunidades, dando a
entender que es un lugar donde están confinados los demonios o ángeles, en espera del
juicio del gran día. Por el relato bíblico del endemoniado gadareno, parece ser
que los ángeles o demonios que se
humanan, o se posesionan de un humano, al perecer el cuerpo del poseído, o al
salir de él, los demonios no regresan a su anterior morada sino que van a ese
lugar lúgubre del abismo.
Eso
se deduce por lo que ellos le dijeron a Jesús, ya que al ser echados fuera del
cuerpo del hombre de Gadara; ellos ya sabían cuál era su nuevo lugar, el oscuro
abismo. En efecto en Lucas 8:31 “lo relata
diciendo que los demonios que estaban en el gadareno: Le rogaban que no les
mandara ir al abismo. Y había allí
una piara de muchos cerdos paciendo en el monte; y le rogaron que los dejara
entrar en ellos; y los dejó”. Tanto los que están en el abismo como los
que van a ser arrojados del cielo, serán juzgados por los creyentes. Así lo enseña en 1 Corintios 6.3 diciendo: ¿”O no sabéis que hemos de juzgar a los
ángeles? ¿Cuánto más las cosas de esta
vida”?
VOLVIENDO AL TEMA DEL
ARREBATAMIENTO, O TRASLADO DE LOS
REDIMIDOS.
Realmente nos hemos apartado un poco del
tema principal que iniciamos el cual es “el traslado
de los redimidos”. Sin embargo las anteriores explicaciones
robustecen y dan más claridad al argumento del arrebatamiento. Como ya se explicó el arrebatamiento o la resurrección tiene un
orden establecido de tres etapas que lo revela en 1 Corintios 15:23-24 el cual es: “Pero cada uno en su orden: Cristo
que es las primicias, luego, los
que son de Cristo en su venida. Luego
el fin: cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando suprima todo
imperio, y toda autoridad y poder”.
CRISTO, LAS PRIMICIAS PRIMER
EVENTO DE LOS TRES ÓRDENES ESTABLECIDOS.
Para continuar con este fascinante tema
del arrebatamiento, se comenzará diciendo que, éste se efectuará o se hará
realidad cuando el Señor levante su iglesia. Lo que muchos no se explican o no
llegan a comprender es, porque si el
primer orden de la resurrección es Cristo las primicias; se quiere incluir
a los creyentes en este primer orden, y no en el segundo orden los que son de cristo en su venida. Ya
que nosotros somos de Cristo.
Una respuesta simple a esa inquietud
sería: porque por disposición divina, Pablo escribió en Efesios 2:6 “y juntamente con Jesús el Mesías nos
resucitó y nos hizo sentar en los cielos”. De esta manera y según lo que
Abraham creyó, que Dios resucita los muertos y ve las cosas que todavía no son,
como una realidad ya cumplida.
Esto lo afirma en Romanos 4:17 refiriéndose
a Abraham que dice: “(como está escrito:
Te he puesto por padre de muchas gentes) delante de Dios, de quien creyó que da
vida a los muertos, y que llama las cosas que no son como si fueran”.
Es imprescindible que nosotros también
creamos firmemente en lo que Dios afirma en su palabra: que ya hemos resucitado con Cristo y estamos sentados con Él en el
cielo. Aunque eso no se ha realizado todavía en lo físico, por fe debemos
creerlo no como auto sugestión, sino porque así lo afirma su palabra en Efesios
2:6. Cosa que se realizará o cumplirá en el arrebatamiento.
Otra respuesta a esa aparente discrepancia
podría ser, que una cosa es ser de
Cristo y haber creído en él, otra muy
diferente es ser una sola cosa con
cristo. Hay que aplicar lo que Jesús dice en su palabra, y no lo que
nosotros podamos pensar. Lo que dice Jesús de esos discípulos que creyeron en
él, en Juan 17:21: “para que todos sean
uno como Tú, Padre, en mí, y Yo en ti; que también ellos estén en Nosotros,
para que el mundo crea que Tú me enviaste”.
Luego
si somos una sola cosa con Él, el cual resucitó, igualmente nosotros hemos
resucitado con él. Y esto no es algo que lo diga o lo piense alguien en
particular, sino como ya lo hemos leído y lo repetimos; siendo la misma palabra
la que lo afirma diciendo en Efesios 2:6: “Y
juntamente con Jesús el Mesías nos resucitó y nos hizo sentar en los cielos”.
Desde el momento que creímos fuimos inmersos o bautizados con el Espíritu Santo
de la promesa llegando a ser una sola cosa con Cristo.
Luego alguien podría decir: ¿entonces quiénes son los que son de Cristo
en su venida? Esos simplemente son otros creyentes escogidos, quienes aunque
pertenezcan a la familia de Dios, no alcanzaron ese nivel de fe y dedicación a su
obra, como el amar al prójimo en sus necesidades, tener paz con todos para
obtener el galardón completo. Y esto consiste en ser una sola cosa con Jesús y
con el Padre, es como pertenecer a la Jerusalén celestial.
Para poderlo asimilar mejor se podría tomar
como tipo, el ejemplo de lo que aconteció con los israelitas que murieron en el
desierto. A ellos no se les permitió entrar a la tierra prometida; pero
pertenecen a la familia terrenal de Dios. Mientras los que entraron en Canaán donde fluía leche y miel, la tierra
prometida; es un tipo de los que pertenecen a la familia celestial.
Y ¿qué diríamos del actual Israel, que
hasta el día de hoy desprecian la palabra “Jesucristo”, aunque ellos sean de
Cristo? ¿Pertenecen ellos a la Jerusalén celestial? Ciertamente No (aunque
muchos de ellos se unieron a la fe del Mesías), la gran mayoría no son del mismo corral, son de otro
rebaño, pero pertenecen al mismo y bondadoso pastor Jesucristo que los compró
con su muerte en la cruz.
El mismo Jesús se lo insinuó a esa pequeña
manada que le seguía, en Juan 10:16 al decirles: “También tengo otras ovejas que no son de este redil; también a ellas
debo traer, y oirán mi voz, y vendrán a ser un solo rebaño, y un solo Pastor”.
De manera que Jesucristo tiene varios
grupos pero Él es el pastor de todos. Recordemos a Abraham el cual tenía muchas
ovejas y ganado, a cargo de varios
pastores pero él era el dueño de todo.
LA DIFERENCIA ENTRE
EL ARREBATAMIENTO Y EL REGRESO DE JESÚS A LA TIERRA.
Aunque el apóstol Pablo nos ha dejado
valiosos escritos sobre el arrebatamiento, el que da detalles más
precisos del tema es el mismo Jesús. Éstos se encuentran tanto
en el evangelio de Mateo, como en
el de Lucas donde la misma palabra establece una diferencia muy evidente entre
el arrebatamiento y el regreso del Señor a este mundo. Aunque Mateo 24 y Lucas
17 digan lo mismo, se utilizará lo que el Señor dijo en Lucas que tiene una
mejor secuencia .
CAPÍTULO 3
CAPÍTULO 3
ESTE TEMA CONSTA DE 17 CAPÍTULOS, Y ABARCA DESDE LOS DÍAS ACTUALES, EL ARREBATAMIENTO, LA GRAN TRIBULACIÓN, Y HASTA EL "DÍA DE DIOS", DESPUÉS DEL MILENIO. DE CONTINUAR INTERESADOS EN SU LECTURA, PUEDE HAGA CLIC EN EL SIGUIENTE ENLACE "EVENTOS FUTUROS EN SU ORDEN" GRACIAS
Mirian Victoria Cortez Cumana Edo.Sucre.--Este estudio es bastante interesante, aunque complejo y profundo que debemos los creyentes en Cristo Jesús tomarlo muy en cuenta por las señales de los últimos tiempos del fin que estamos viviendo, (maldad, violencia, terremotos, hambre etc.) donde Dios nos esta revelando su palabra diariamente por los acontecimientos que vemos a diario y no podemos ser indiferente a ello, sino estar apercibidos. Marcos 13:29-31Asi, también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, conoced que esta cerca, a las puertas.31 El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.Pazy bendiciones..
ResponderBorrarGracias hermano Aggeo por el gran aporte ya que estos estudios nos ayudan a comprender mejor la Palabra de Dios, ademas que crean en nosotros un mayor deseo de seguir aprendiendo, Hermano como puedo tener el estudio completo?, le dejo mi correo: sozacesar@gmail.com
ResponderBorrarsaludos, Gracia y Paz